Faust a Buenos Aires

Marguerite alla Messa Nera

  di Gustavo Gabriel Otero

L'opera di Gounod apre la stagione della Asociación de Ópera Buenos Aires Lírica con un esito buono, anche se non eccellente.

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Buenos Aires, 16 aprile 2016 - La Asociación de Ópera Buenos Aires Lírica ha aperto la sua quattordicesima stagione con Faust di Gounod. Sebbene già nel 2006 il titolo fosse già stato proposto, in questo caso si è puntato su un cast del tutto differente e su una nuova produzione scenica. Se nel 2006 l'esito fu alterno, in questo caso le cose hanno funzionato meglio senza raggiungere l'eccellenza.

L'opera è condensata dai cinque atti originali in quattro, con alcuni tagli, il più importante dei quali consiste nell'eliminazione dell'intera prima scena del quinto atto: La nuit de Walpurgis.

Javier Logioia Orbe ha diretto con cura meticolosa senza però che l'orchestra brillasse e si elevasse secondo un autentico stile francese. Le stecche di alcuni strumenti, o i cali di concentrazione di altri professori - che scrivevano messaggi al cellulare durante la rappresentazione - non possono imputarsi al concertatore.

Darío Schmunck - cantante argentino dall'interessante carriera internazionale - è stato un credibile dottor Faust sul piano scenico, cantante sicuro, di bel timbro, mezzi saldi e buon fraseggio. Perfetto negli acuti gli è mancato giusto un po' più di spessore centrale nella prima scena.

Il soprano Marina Silva è stata una salda Marguerite, con buona linea di canto, omogeneità dei registri e notevole coinvolgimento.

Hernán Iturralde a sua volta ha incarnato un Méphistophélès perfetto. Attore magnetico, si è trasformato nel costante fulcro dell'azione. Irreprensibile vocalmente, è sempre sicuro nell'emissione e adeguato nella proiezione.

Ernesto Bauer ha offerto qualità e solidità a Valentin mentre Cecilia Pastawski è stata un irreprensibile Siebel.

Corretto il Wagner di Juan Fond e, dimostrando che per i cantanti di valore non esistono piccoli ruoli, Virginia Correa Dupuy ha saputo trarre il miglior partito dalla sua Marthe.

Il coro preparato da Juan Casasbellas ha compiuto il suo dovere, accresciuto da un impegno attoriale che lo avvicinava allo stile del musical.

Il talentuoso Pablo Maritano ha allestito questo spettacolo in origine lo scorso anno al Teatro El Círculo de Rosario. L'azione è trasposta in Francia ai tempi della Seconda Guerra Mondiale. Soluzione talmente abusata da risultare ormai consueta, poco creativa e, infine, noiosa.

Questa trasposizione sembra voler ottundere tutta la simbologia religiosa e filosofica del soggetto che, sebbene i librettisti di Gounod abbiano privilegiato la storia d'amore, è sottintesa anche nell'opera.

Le caratterizzazioni attoriali sono parse adeguate, il coro sempre impegnatissimo e se la messa in scena non ha offerto troppi spunti, non si può nemmeno dire che abbia fatto danni. All'attivo si devono, per esempio, segnalare l'ingresso di Mephistophélès dalla platea e l'uso di un palco da cui Faust e il demone osservano parte dell'azione. D'altra parte, il peggio è venuto nella scena della Chiesa, in cui il Diavolo non si nasconde nell'oscurità, ma si pone in piena luce, al centro della scena, di fronte a un crocifisso rovesciato. Non pare nemmeno credibile che Marguerite partecipi a una messa nera celebrata da Méphistophélès  in cui si offre l'eucarestia a una donna nuda con i gioielli e l'acconciatura della stessa tormentata protagonista, che in realtà si reca nel tempio per cercare pace e conforto trovando, invece, il demonio.

Funzionale la scenografia di Enrique Bordolini e dello stesso Maritano, coerenti i costumi di Ramiro Sorrequieta e creativo il disegno luci di Bordolini.

Buenos Aires. 16/04/2016. Teatro Avenida. Charles Gounod: Faust. Opera in cinque atti, libretto di Michel Carré e Jules Barbier, dal Faust di J. W. Goethe. Pablo Maritano, regia. Enrique Bordolini e Pablo Maritano, scene. Ramiro Sorrequieta, costumi. Enrique Bordolini, luci. Produzione originale del Teatro El Círculo de Rosario (Stagione 2015). Darío Schmunck (Faust), Hernán Iturralde (Méphistophélès), Marina Silva (Marguerite), Ernesto Bauer (Valentin), Cecilia Pastawski (Siebel), Juan Font (Wagner), Virginia Correa Dupuy (Marthe). Orchestra e Coro di Buenos Aires Lírica. Maestro del Coro: Juan Casasbellas. Maestro concertatore e direttore: Javier Logioia Orbe. Produzione Asociación Buenos Aires Lírica.


Marguerite a la Misa Nigra

 por Gustavo Gabriel Otero

La Asociación de Ópera Buenos Aires Lírica inició su Temporada con la ópera de Gounod: una buena versión sin rayar en la excelencia.

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Buenos Aires. 16/04/2016 - La Asociación de Ópera Buenos Aires Lírica inició su Temporada número catorce con Faust de Gounod. Si bien en 2006 ya había ofrecido la obra, en esta oportunidad la versión contó con elencos totalmente diferentes así como una nueva producción escénica. Si en 2006 el espectáculo resultó irregular en esta oportunidad las cosas funcionaron mejor sin rayar en la excelencia.

La ópera se redujo de los cinco actos originales a cuatro con algunos cortes, el más importante fue la eliminación de toda la escena primera del quinto acto: La noche de Walpurgis.

Javier Logioia Orbe condujo una versión prolija y cuidada desde lo orquestal pero sin brillo, sin vuelo y sin el adecuado estilo francés. Las pifias de algunos instrumentistas o la falta de concentración de alguno de los maestros de la orquesta -utilizando sus teléfonos portables para escribir mensajes durante la representación- no son algo que pueda achacarse al director musical.

Darío Schmunck - cantante argentino de interesante carrera internacional - ofreció un creíble doctor Faust desde lo escénico y encaró la parte con seguridad vocal, bello timbre, sólidos recursos y buena línea de canto. Perfecto en los agudos se echó de menos un poco más de caudal central en la primera escena.

La soprano Marina Silva resultó sólida en su Marguerite, con buena línea de canto, registro parejo y notable entrega.

Hernán Iturralde fue un Mefistófeles de cuidada perfección. Magnético en la escena se convirtió en forma permanente en el eje de la acción. Vocalmente irreprochable fue seguro en la emisión y adecuado en el volumen.

Ernesto Bauer aportó calidad y seguridad a Valentín mientras que Cecilia Pastawski fue un irreprochable Siebel.

Correcto el Wagner de Juan Fond y demostrando que no hay roles pequeños para buenos cantantes, Virginia Correa Dupuy supo sacar el mejor d e los partidos a su Marthe.

El coro preparado por Juan Casasbellas, fue solvente con un plus en la actuación marcada generalmente como en los coros de las comedias musicales.

El talentoso Pablo Maritano presentó originalmente esta puesta en escena el año pasado en el Teatro El Círculo de Rosario. La acción se trasladó a Francia en tiempos cercanos a la Segunda Guerra Mundial. Solución tan usada en los últimos tiempos que ya resulta rutinaria, poco creativa y aburrida.

Con la traslación pareció querer quitarse toda la simbología religiosa y filosófica que tiene la obra, que si bien en manos de los libretistas de Gounod quedó más como una historia de amor, aún subyace en la ópera.

Las marcaciones actorales fueron adecuadas, el coro se mostró siempre como en una comedia musical y si bien la puesta en escena no aportó mucho tampoco molestó demasiado. Fueron buenos recursos el ingreso y salida de Mefistófeles por la platea y el uso de un palco para que tanto Fausto como el diablo miraran parte de la acción. Quizás la peor resolución sea la escena de la Iglesia donde el Diablo en lugar de estar en la oscuridad está plenamente iluminado y en el centro de la escena frente a un crucifijo invertido. No parece razonable, tampoco, que Margarita concurra a una Misa Negra celebrada por Mefistófeles, en la que ofrece las especies a una mujer desnuda con el mismo peinado y joyas que la torturada protagonista, cuando en realidad ella va al templo en busca de consuelo y paz y es perturbada por el demonio.

Funcional la escenografía de Enrique Bordolini y el propio Maritano, adecuados al concepto de la puesta los trajes de Ramiro Sorrequieta y creativa la iluminación de Bordolini.

Buenos Aires. 16/04/2016. Teatro Avenida. Charles Gounod: Faust. Ópera en cinco actos. Libreto de Michel Carré y Jules Barbier, basado en Faust de J. W. Goethe. Pablo Maritano, dirección escénica. Enrique Bordolini y Pablo Maritano, escenografía. Ramiro Sorrequieta, vestuario. Enrique Bordolini, iluminación. Producción Escénica original del Teatro El Círculo de Rosario (Temporada 2015). Darío Schmunck (Faust), Hernán Iturralde (Méphistophélès), Marina Silva (Marguerite), Ernesto Bauer (Valentin), Cecilia Pastawski (Siebel), Juan Font (Wagner), Virginia Correa Dupuy (Marthe). Orquesta y Coro de Buenos Aires Lírica. Director del Coro: Juan Casasbellas. Dirección Musical: Javier Logioia Orbe. Espectáculo presentado y producido por la Asociación Buenos Aires Lírica.